En un mundo donde la seguridad y la prevención de riesgos son más importantes que nunca, contar con los elementos adecuados para afrontar emergencias es esencial. Imagina que te encuentras en un laboratorio y, de repente, un pequeño accidente provoca un conato de incendio. En esos momentos críticos, una simple herramienta puede marcar la diferencia entre un susto y una tragedia: la manta ignífuga. Este producto no solo es un complemento de seguridad, sino una verdadera línea de defensa en situaciones de fuego.
En este artículo, exploraremos qué es la manta ignífuga, para qué sirve, cómo utilizarla y las numerosas ventajas que ofrece en la protección contra incendios. Además, responderemos a algunas de las preguntas más frecuentes sobre este importante dispositivo, para que puedas tomar decisiones informadas en materia de seguridad.
¿Qué es la manta ignífuga y para qué sirve?
La manta apagafuego o manta antifuego sirve para combatir conatos de incendio y evitar posibles quemaduras durante el proceso de evacuación en un edificio en llamas.
Una lámina fabricada con materiales resistentes al fuego que impide la entrada de oxígeno al colocarla encima del fuego.
Una de las características fundamentales de nuestras mantas ignífugas es que cumplen con la normativa UNE – EN 1869/1997. Esta norma europea consta de 3 apartados que definen y marcan los requisitos que se deben cumplir para garantizar la seguridad de uso del producto. Es muy importante que cuentes con este requisito ya que ayudará a salvar vidas. Puede estar interesante verel post sobre la «Normativa antiincendios en naves industriales«.
Cabe destacar que también deben cumplir la normativa CE, es decir, el marcado de Conformidad Europea. Este incorpora una declaración del fabricante que indica que se han tenido en cuenta todas las recomendaciones de seguridad que la Comisión Europea ha estipulado.
Uso de la manta ignífuga
La manta ignífuga se emplea para sofocar fuegos pequeños. Es muy importante disponer de este elemento ya que, cuando existen conatos de fuego, utilizar extintores o agua puede resultar contraproducente.
En el supuesto caso de que haya una persona con ropa en llamas, el procedimiento es muy sencillo: simplemente se debe envolver con rapidez al individuo para extinguir el oxígeno y conseguir apagar el fuego.
Además, en caso de incendio, es un dispositivo muy útil ya que se puede cubrir uno con la manta, protegerse del calor y darse unos minutos más para poder escapar del fuego hasta un lugar seguro.
Puede serte útil investigar y conocer Las mejores mantas ignífugas del mercado y aprender a Gestionar tus residuos inflamables y aceitosos.
Diferencias entre manta ignífuga y extintor
– Manta ignífuga: Eficaz en fuegos pequeños, fácil de usar, ideal para situaciones de pánico.
– Extintor: Mejor para fuegos más grandes, requiere un manejo más técnico.
- Guía para que tus compañeros vuelvan siempre sanos del trabajo
- 3 soluciones reales a tus problemas de seguridad industrial a la semana

¿Cómo utilizar una manta apagafuegos?
El uso de la manta ignífuga es sencillo. Aquí te dejamos los cinco pasos básicos que debes seguir:
1. Tira de los tiradores: Extrae la manta tirando simultáneamente de los tiradores que sobresalen.
2. Despliega la manta: Una vez fuera, desdóblala completamente.
3. Protege tus manos: Gira hacia adentro la manta utilizando los tiradores para proteger tus manos.
4. Coloca la manta: Asegúrate de cubrir el fuego o a la persona afectada.
5. Mantén la manta en su lugar: Cubre el fuego o a la víctima durante al menos 20 minutos.

10 Ventajas para la protección contra incendios
Algunas de las ventajas que la manta ignífuga proporciona son:
– Ofrece una protección de los empleados y de los bienes.
– Es un producto muy económico.
– No necesita mantenimiento.
– Gracias a su fácil modo de empleo y ligereza puede ser utilizada por cualquier persona.
– Se mantiene limpia y libre de partículas de llamas una vez se haya utilizado.
– Vienen con llamativos colores y flechas reflectantes para ser rápidamente localizadas y se pueden instalar en cualquier lugar visible.
– Combate posibles conatos de incendio, sobre todo en pequeños focos iniciales.
– Es apta para bloquear el calor y actuar como barrera a la hora de huir de un incendio.
– Evita posibles quemaduras durante un proceso de evacuación de incendios.
– Es el sistema más seguro para apagar fuegos provocados por aceite.
¿Te vas a perder 3 consejos rápidos a la semana en tu email?
Esta suscripción gratuita te ofrece:
- Guía para que tus compañeros vuelvan siempre sanos del trabajo
- 3 soluciones reales a tus problemas de seguridad industrial a la semana
Más de 7.539 registros
Preguntas Frecuentes sobre la manta ignífuga
¿Qué tipo de fuego se puede apagar con una manta ignífuga?
La manta ignífuga es ideal para fuegos pequeños, como los que se producen en la cocina o en laboratorios. No es adecuada para fuegos de gran magnitud.
¿Cuándo debo usar una manta ignífuga en lugar de un extintor?
Utiliza la manta ignífuga cuando enfrentes un fuego inicial o si necesitas actuar rápidamente sin complicaciones. Para fuegos más grandes, un extintor es más apropiado.
¿Cómo saber si mi manta ignífuga está en buen estado?
Revisa regularmente el estado de la manta, asegurándote de que no presente daños visibles y que esté correctamente almacenada.
La manta ignífuga es un elemento clave en la protección contra incendios, proporcionando una solución eficaz y sencilla para combatir fuegos pequeños y proteger a las personas. Si aún no tienes una en tu lugar de trabajo, considera añadirla a tus medidas de seguridad.
Visita nuestra tienda y adquiere una manta ignífuga para garantizar la seguridad de tu espacio.