En España la siniestralidad laboral es uno de los problemas empresariales más grave. En 2021 se produjeron, según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social, 317.258 accidentes laborales, un 6,9% más respecto al año anterior.
Aunque se haga cada vez más hincapié en su prevención, estas cifras aumentan cada año. Estos accidentes no sólo ponen en riesgo la salud y la seguridad de los trabajadores, también comprometen el futuro de la misma empresa.
A continuación, vamos a explicar exactamente qué es un accidente de trabajo, unos ejemplos, cuáles son los derechos del trabajador víctima de accidente de trabajo y sobre todo cuáles son las consecuencias para las empresas.
Derechos del trabajador tras sufrir un accidente laboral
La persona trabajadora que sufra un accidente laboral tiene derecho a unas prestaciones de la Seguridad Social aunque no esté dado de alta.
Además, aunque no haya responsabilidad por parte de la empresa, el trabajador puede tener derecho a una indemnización si así está indicado en el convenio colectivo de aplicación.
En general, las prestaciones e indemnizaciones que se pueden reclamar son:
- Una prestación del 75% de su base reguladora durante la baja por incapacidad temporal.
- Una pensión de incapacidad permanente, si el trabajador no esté capacitado para trabajar.
- Una indemnización para el caso en que exista responsabilidad empresarial civil de la empresa, o cuando que se haya concedido una incapacidad permanente y el convenio recoge el derecho a una indemnización o, finalmente, si la persona trabajadora sufra limitaciones funcionales, pero no suficientes para que se le conceda una incapacidad permanente.
Cómo se indemniza al trabajador por accidente de trabajo
La persona trabajadora puede pedir muchos tipos de indemnización:
Indemnización por lesiones permanentes no invalidantes
Cuando el trabajador no puede desempeñar sus funciones habituales o análogas puede acceder a este tipo de prestación: tiene derecho a percibir una indemnización satisfecha a cargo de la Mutua.
Indemnización por omisión de medidas de seguridad
Si el accidente se produce por la omisión de medidas de seguridad se puede percibir indemnizaciones de hasta 1 millón de euros. Será el trabajador que tendrá que demonstrar que la empresa no puso en marcha las medidas de seguridad exigibles por ley.
Indemnización por incapacidad
El trabajador puede reclamar una pensión del 55% de su salario mensual si el accidente ocasiona una incapacidad permanente parcial.
Indemnización por seguro de convenio
Se puede reclamar la indemnización cuando las lesiones producen una incapacidad permanente total.
Las obligaciones de las empresas
En el artículo 14 de la Ley de prevención de riesgos laborales se establece que “el empresario deberá garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores a su servicio en todos los aspectos relacionados con el trabajo”.
Si existe una responsabilidad empresarial civil por parte de la empresa y si se han suministrado los equipos de protección individual (EPIS) obligatorios, la empresa podrá no proporcionar una indemnización por los daños y perjuicios sufridos derivados de un accidente.
En otras palabras, un trabajador no puede exigir una indemnización cuando la siniestralidad se deriva de un caso fortuito o por su comportamiento negligente.
Por otro lado, si el empresario comete infracciones en materia de prevención de riesgos laborales, se implica la incoación de un procedimiento sancionador que se iniciará de oficio o previa existencia de denuncia.
Responsabilidad administrativa por accidente laboral
Las multas por no seguir la regularización pueden oscilar entre los 2.045€, por faltas leves, hasta los 40.985€, por faltas graves. La empresa, incluso, puede alcanzar una multa de 819.780€ por las faltas muy graves,
Cuando la empresa incurre en falta de medidas de seguridad, tendrá que abonar al trabajador una cuantía que supone un 30 o 50% más de la prestación a la que tiene derecho el trabajador.
Como hemos adelantado, las multas a pagar dependen de la gravedad de las infracciones y se dividen en:
Infracciones leves
Pueden ser, por ejemplo, la falta de limpieza, la comunicación de apertura o reanudación de trabajo no cualificado o el incumplimiento intrascendente de la normativa de prevención formal.
Son sancionables entre 30,05€ hasta un máximo de 1.502,53€.
Infracciones graves
Son las que ocurren por falta del plan de prevención como, por ejemplo, la falta de reconocimientos médicos, la falta de información, de formación y el incumplimiento de la normativa.
Las infracciones graves se pueden multar con una sanción entre 1.502,53€ hasta 30.050,61€.
Infracciones muy graves
Son todas aquellas que ocurren por no observar las normas sobre protección de embarazo y lactancia, por no paralizar los trabajos peligrosos, por la falta de confidencialidad de los datos de los trabajadores, por superar los límites de exposición de los agentes nocivos.
Las multas oscilan entre los 30.050,62€ y los 601.012,10€.
Hay consecuencias también a nivel penal: las empresas que no cumplan con la normativa de prevención de riesgos laborales y que, de esta forma, supongan un riesgo grave para la vida de sus trabajadores serán penados con entre 6 meses y 3 años de prisión, pudiendo esta ser sustituida por multas. Por imprudencia grave y causando la muerte de alguno de sus trabajadores, los empresarios serán penados con entre 1 y 4 años de cárcel.